La primera cuadra de la avenida 31 de Octubre, en Villa San Antonio, sigue cerrada al paso de los vehículos. Los comerciantes de la Asociación 31 de Octubre, que se resisten a ingresar en el mercado Kollasuyo, un edificio de cuatro plantas ubicado en la cuadra del frente, donde empieza Villa Copacabana, mantienen la presión de esta manera. El fin de semana reciente, las ventas se efectuaron como siempre, en ambos mercados. En el Kollasuyo hay lugar para ubicar a una veintena más de vendedores, pero los de la Asociación 31 de Octubre dicen ser más de 140. La Alcaldía de La Paz no logra resolver el conflicto que estalló en octubre de 2013 y que se ha reavidado hace dos semanas. Foto: Mabel Franco
Vecinos de los barrios de Anutha-Hansa-Anutha, Cota Cota, Rosales, Arenales y Coqueni marcharon esta mañana (30 de mayo) por las principales vías de la zona Sur de La Paz. Exigen a las autoridades ediles que desalojen a un grupo de gente que se ha asentado en parte del bosquecillo de Cota Cota, área verde del barrio.
“Los loteadores se adueñaron de nuestras áreas verdes; dicen que tienen un derecho propietario que les fue otorgado por la Alcaldía de Palca, no de La Paz, y ya están edificando. Nosotros teníamos financiamiento para construir una guardería con un jardín, pero la Alcaldía no protege el lugar”, señaló Chrystal Ostermann, presidenta de la junta de vecinos del barrio Anutha-Hansa-Anutha, La marcha recorrió por la avenida principal de Cota Cota y la de Calacoto, hasta llegar a la Calle 11 de Obrajes, donde se encuentra la Subalcaldía de la Zona Sur.
Una vez en el lugar, los vecinos se encontraron con las puertas cerradas y por ello anunciaron una segunda marcha, para la próxima semana, que esta vez llegará, dijeron, hasta la Alcaldía de La Paz. Foto: Milen Saavedra
Graditas frente al templo de San Francisco, en La Paz. Largas filas para inscribirse en el padrón biométrico. Charlas intensas, risotadas, bocinazos... y esta señora imperturbable leyendo la noticia de un diario: "Bono llega a un millón de mujeres". ¿Que en Bolivia se lee poco? Tal vez porque lo que se publica no interesa a todos. Foto: Mabel Franco