La ventilación de un “nuevoviejo” o “viejonuevo” amor de Evo Morales, Gabriela Zapata, parece estar develando el ser hombre/padre del Presidente. Su “secreta/pública” vida amorosa heterosexual revela, al menos hasta la fecha, una característica: ¡ninguna mujer va para él! Aunque también hace evidente que su celibato, supuesto en vista de su intenso trabajo como gobernante, nunca fue real.
Las medidas represivas del Estado contra los jóvenes que delinquen en Centroamérica, no sólo no resuelven los problemas de fondo, sino los agravan, al enfrentarlos a un sistema ciego, sin rutas de rehabilitación capaces de ofrecer nuevas oportunidades de vida. A eso se añade un ámbito laboral no apto para jóvenes rescatados de un contexto de pobreza, violencia y criminalidad.
No podemos perder de vista que estamos en un momento de evolución y convergencia tecnológica que avanza cada vez más rápido y en el que nuestras decisiones –individuales y colectivas– sobre cómo desarrollamos y usamos las tecnologías –y sobre qué valores y cualidades políticas se reflejan en ellas– determinarán qué tan libres son las redes con las que vivamos.
En breve, Potosí se convertiría, a principios del siglo XVII, en la ciudad más populosa del Occidente, con más habitantes y tapices y bodegas que Londres o París. Lo cuenta así Arzans, el Cronista Mayor de la Villa Imperial: las fiestas que conmemoraban a una santa menor duraban dos semanas. Las putas finas venían de Marruecos o de más lejos. Otros tiempos. Otros oestes pero que igual pueden seguir obsesionando.