Noelia Gómez, ciberactivista
Por primera vez en el país, una movida generada desde las redes en contra de la violencia de género consigue que en menos de una semana una valla publicitaria sea retirada. Demostrado: muchas de las y también los cibernautas no sólo utilizamos las redes como espacio de socialización o información, sino como un espacio público para la movilización.
El 26 de julio, desde una cuenta en Facebook se denunció públicamente la publicidad de la empresa VIVA –parte de la campaña “los hinchapelotas”– que llevaba el siguiente slogan: “Si te gusta una mujer y tiene novio, recuerda: en el fútbol hay porteros y aun así se anotan goles”. Parte de la fiebre mundialera, imagino, que de por sí ya está plegada de estereotipos y roles en los cuales las mujeres no nos llevamos la mejor parte (se supone, debemos sentirnos desplazadas por el fútbol, ¡los hombres dejan de prestarnos atención!, como si estuviésemos genéticamente configuradas para no entender o disfrutar del deporte).
El post fue compartido 40 veces, ciberactivistas viralizando la fotografía y convocando a amigos y grupos a pronunciarse al respecto; por supuesto, también comenzaron las denuncias en la página Facebook de VIVA, con respuestas poco convincentes, “…a veces el sentido del humor se confunde con machismo. Nosotros para nada somos una empresa machista; una clara prueba es que muchos cargos jerárquicos están ocupados por mujeres y que tenemos como causa la lucha contra toda forma de violencia”. Ok, no fue su intención, y además contratan a mujeres para cargos jerárquicos; ¿pero? ¿acaso alguna de ellas tuvo la valentía de oponerse a la publicidad o siquiera se dio cuenta de lo denigrante que resultaba para ellas mismas? Mientras, la valla seguía en su lugar.
Segunda reacción, amenazas de los usuarios de cancelar los contratos de servicios con la empresa si la publicidad no era retirada en 48 horas, acompañadas de acciones offline propuestas en los debates que se generaron dentro de la red. Sin embargo, no fue sino hasta que se consiguió una comunicación directa con la Jefa de Ventas Internacionales, que las denuncias y amenazas fueron tomadas en serio: el 30 de julio la publicidad había sido retirada.
Es importante mencionar que si bien la mayor parte de personas y grupos a los que se acudió para solicitar apoyo en la movida tuvieron respuestas positivas (en diferentes grados, algunos involucrándose en el debate y proponiendo medidas y apoyo offline, otros solo con un like y otros compartiendo la denuncia en sus muros), no todos reaccionaron así. Destaca el caso de un grupo en el cual se posteó la denuncia y los integrantes del mismo decidieron no apoyar la movida arguyendo la falta de contenido sexista de la publicidad, la excesiva susceptibilidad al analizar los mensajes publicitarios, la incapacidad de entender un “chiste”, entre otros.
Queda claro que este tipo de “humor” en las publicidades está tan naturalizado en nuestra sociedad que algunos todavía necesitan que se les explique en qué lugar se encuentra la agresión contra las mujeres, y aun así hay quienes no llegan a entenderlo. En este caso específico, invalidar a la mujer en su capacidad de decidir acerca de su cuerpo y sus relaciones, asemejándola a un arco del cual no depende que entren o no los goles sino de las habilidades del arquero y el jugador (personas, estos sí). Este tipo de mensajes, por supuesto, tienen su correlato en los índices de violencia contra las mujeres, vista como objeto que se posee, que no goza de capacidad de decisión: ¿por y para qué respetarla, no golpearla o discriminarla?
Lo positivo: poco a poco la sociedad se está haciendo más consciente de los derechos de las mujeres, está tomando acciones para frenar las actitudes o mensajes que reproducen la estructura machista y violenta de la cual somos parte, y las redes sociales son una herramienta que está ayudando a este proceso. Queda mucho por hacer, pero vamos en buen camino.
Nota: Ver también:http://www.lapublica.org.bo/reportaje-mensual/articulos-tiro-libre/item/94-futbol-se-conjuga-en-masculino
