Mabel Franco / La Paz
“No hay libertad política si no hay libertad sexual”. Éste podría ser el texto de un graffiti estupendo, sólo que esta vez, en lugar de interpelar desde algún muro urbano, se erigirá a la manera de un aparato radiográfico dentro de la Vicepresidencia del Estado Plurinacional de Bolivia. Hasta allí serán invitados a trasladarse diputados y senadores, uno por uno, para responder a una entrevista y un cuestionario que les serán formulados por integrantes del colectivo feminista Mujeres Creando.
El estudio con aire de graffiti es, pues, una propuesta del grupo que tiene en María Galindo a su rostro más visible y que ha merecido el respaldo, conquistado La barricada mediante, del vicepresidente Álvaro García Linera. Es cierto que esta autoridad se ha tomado cinco meses en dar su respuesta, pero ha honrado un compromiso público hecho ante los micrófonos de la radio Deseo, así que las entrevistadoras tienen ya una oficina en el segundo piso de la Vicepresidencia. Allí están instaladas cámaras, grabadoras y otros instrumentos con los que se registrarán los encuentros.
El trabajo debió comenzar ya, pero el receso de los asambleístas está retrasándolo. En todo caso, como hace saber María, el equipo, debidamente acreditado, tiene la paciencia, la tozudez y la energía suficientes como para esperar y, una vez en marcha, llegar hasta el fin.
El objeto de estudio son, como está dicho, los asambleístas. “Hay que reconocer la enorme variedad de personas que hay en esta institución: de edades, regiones, orígenes culturales, de clase… es una melcocha total, con historias de cada uno ¡inimaginables!”. Lo que hace prever resultados interesantes y reveladores. ¿En qué sentido? Pues en cuanto a homofobia, una forma de discriminación en Bolivia más fuerte que el racismo, a decir de la activista.
Las preguntas serán la clave para disponer de una radiografía certera. Y en formularlas se ha volcado toda la experiencia y la creatividad de Mujeres Creando, particularmente de María. Por ahora se las guarda en reserva, pues sin que las entrevistas deban confundirse con una de las sonadas barricadas radiales, la intención de hurgar en las estructuras sociales de los estudiados, de obtener respuestas espontáneas acerca de cómo se construyen las nociones de hombres y mujeres, amerita que se constituyan en una sorpresa.
Quien las ha revisado ha sido García Linera. Él había puesto la condición de que sin conocerlas, sin tener además una propuesta del estudio por escrito, no iba a dar su autorización. La ha dado, así que ha debido quedar satisfecho y convencido del concepto que sustenta el estudio: que los asambleístas pasen de ser representantes a ser representativos.
Cuerpo es política
Para que se vayan aclarando las ideas en torno del estudio y su intención, vale la pena decir lo que no es: “No es una encuesta. No es una inquisición al revés, no es una requisa. No pretende concluir cuán homofóbicos son los asambleístas o qué porcentaje de éstos lo son, pues tal información no nos llevaría a nada”.
María explica que se trata de un estudio político cuyo objetivo es darle ese rango al cuerpo, a la sexualidad. “El discurso de la sexualidad, del cuerpo, está ausente en la política boliviana. En el país podemos hablar de identidades culturales, de religiones, de reivindicaciones sectoriales, de soberanías, de recursos, de ecología... Somos extraordinarios para excéntricos; pero no estamos dispuestos a abrir el cuerpo”. Como feministas, “sabemos que el cuerpo es el primer lugar de la política”, de allí que “No hay libertad política si no hay libertad sexual” es un estudio político.
“La homofobia –dice la activista-- es un conjunto de creencias muy sólidas; la persona homofóbica está convencida de sus posturas, además que está en el lugar de lo correcto, de la normalidad. Por eso, nos interesa indagar en la estructura de esas creencias, en los miedos a la diferencia, porque ése es el mecanismo para desestructurar”.
La entrevista durará 20 minutos y se espera, “tenemos la osadía para ello”, que participen los 332 diputados y senadores, incluidos los suplentes. Aun en el caso de que algunos se excusen, el estudio pretende contar con no menos del 70%. Para ello es esencial la circular oficial que García Linera ha prometido elaborar, solicitando a los asambleístas colaborar con un trabajo que se estará desarrollando desde la propia Vicepresidencia. Esa circular amable no es lo mismo que la orden que María sugirió a la autoridad emitir, tomando en cuenta la forma en que se votan los asuntos en el órgano legislativo; pero se espera que constituirá una forma de presión.
Como entrevistadoras estará el equipo de Mujeres Creando: hay quienes lo harán en castellano, aymara y quechua, hay maestras, indígenas, chotas, birlochas, un poco de todo. “Y nos hemos abierto también a la mariconería boliviana, joven o changa. Hay mucha desorientación y falta de madurez política en el mundo llamado gay que malcopia las demandas de movimientos de cualquier parte del mundo y se muestra incapaz de inventar un nombre propio o de abrirse horizontes. Este estudio sí que es un horizonte propio y por eso invitamos a quien desee aprender”.
Homofobia y otros laberintos
María aclara que el respaldo del Vicepresidente no tiene que ver con favores ni simpatías mutuas, sino con los argumentos que Mujeres Creando presentaron ante la segunda autoridad del país en sentido de que “la Ley contra el Racismo y toda forma de Discriminación no está funcionando para nada”. Y que así pasa” porque el Poder Judicial está saturado, porque lo punitivo en el campo de la homofobia no es un instrumento transformador, porque las únicas demandas que están prosperando son las que eleva quien tiene poder… “.
Como anarquista que es el colectivo, no cree en leyes para cambiar situaciones; pero de todas maneras, “como un acto testimonial, intenté presentar una denuncia por discriminación y las autoridades no quisieron recibirla, se negaron a poner un sello en el documento porque, claro, el denunciado era entonces el vocero de la bancada oficialista”.
El estudio se presenta así como una herramienta para echar luces sobre una realidad muy compleja: la homofobia, sí, pero también el racismo y el machismo y otras formas de discriminación que son parte del modelo hegemónico cultural que hace presas de mujeres, niños, niñas, adolescentes y otros sectores de la población, explica María. “Tienen la misma estructura, funcionan como primos hermanos; un homofóbico casi con seguridad es un machista y un racista”.
María tiene la hiipótesis de que al poner en evidencia esa estructura, mediante un análisis cualitativo de las respuestas de los asambleístas, será posible mostrar cuán chuta, cuán simplona y hasta ridícula es la ley boliviana frente a la gravedad del problema y cómo se ha tomado el camino fácil del castigo. Y se podrá pensar en qué hacer que sea más efectivo; “enfrentarlo con un sentido transformador, pedagógico”.
Abrir cajas negras
Ciudadanos más devaluados que el marica, la lesbiana, la trans no hay en la sociedad boliviana, repite María. Por eso, la mariconada “es el interlocutor perfecto para valorar las construcciones sociales; ésa es la trascendencia del estudio”.
El Vicepresidente lo entendió íy, como ya se dijo, lo único que debe es la circular. María reflexiona: “Le debe estar costando emitirla por el temor a que le digan que es maricón al auspiciar un estudio de homofobia; y va a pasar. Así son las cosas en nuestra sociedad: un chico flaquito no puede no interesarse en las chicas de su colegio sin correr el riesgo de que lo acosen los compañeros; tú no puedes entrar en La Virgen de los Deseos sin que te digan que eres lesbiana. Así de inquisitorial y persecutorial es esta sociedad”.
Por ello mismo, los resultados seguramente Interesarán a mucha más gente que sólo a la mariconada. La sexualidad “nos constituye en muchos sentidos; cuando hablas de homofobia hablas de tu sexualidad, no del rechazo a la sexualidad del otro, sino de tu sexualidad y el conjunto de contenidos es muy grande.
Tan grande, que también ese estudio podrá ayudar a entender por qué se frenan leyes para despenalizar el aborto, por qué modificar el Código de Familias ha sido tan duro. Por qué en un país cuyo marco constitucional le hace declararse antidiscriminatorio, con vocación de respeto por los DDHH, cualquier diputado o senador, cuando se trata del cuerpo, vota en base de convicciones personales, religiosas, culturales que nada tienen que ver con la Constitución que tanto ha costado tanto construir. Y entonces mujeres, niños, niñas, adolescentes, mariconería pasamos a ser víctimas de unos valores por los que no has votado, de unos sujetos a los que delegaste poder y que resultan ser una caja negra de misterios y convicciones.
Crowdfunding
La entrevista y el cuestionario serán registrados en video y audio, además de que se transcribirán y analizarán en un libro. El material así completo será publicado con una calidad, dice María, que amerite la originalidad de esta iniciativa.
Para lograr la publicación es que se necesitará de recursos, porque por lo demás se cuenta con el voluntariado de Mujeres Creando. Un crowdfunding (micromecenazgo) se ha puesto en marcha, todavía con bajo perfil, pero la respuesta es positiva. Ocurre, dice María, que en el movimiento marica internacional –Suecia, Canadá, EEUU, España y otros países– “no pueden creer lo que se está haciendo: que la persona cuestionada, el marica, se convierta en el que formula las preguntas es darle la vuelta a la tortilla en cuanto a las relaciones de poder” y algo así no se ha visto antes.
Mujeres Creando está pues “con el tenedor y el cuchillo sobre el pollo frito”, grafica María Galindo moviendo las manos que lucen enormes y algunos punzantes anillos.
Una versión impresa salió en el diario Página Siete:
http://www.paginasiete.bo/ideas/2015/7/26/vivimos-politica-sexo-cuerpo-64238.html